martes, 26 de agosto de 2014

UNOS DIAS DEL VERANO EN PIORNAL

Hola a todos:



Unos días de Agosto nos hemos ido a Piornal, el pueblo de mi abu. Allí hemos hecho muchas cosas, además de ver a la familia y a los Abus Grandes.




Hemos ido a los columpios del Vallejo. Allí hemos respirado aire puro y disfrutado en los columpios.







Otra mañana nos fuimos a la gran pinada. Con la ayuda de mi abu  y de mi papá recogimos  leña para hacer un simbólico  fuego.





 




Otra tarde nos reunimos delante de la casa de mis Abus Grandes una gran cantidad de primos, aunque aún faltan muchos. Entre todos conseguimos que nadie se aburriera.

 


También nos hicimos  una meriendas fabulosas con nuestros amigos.




Mi hermano, además, colaboraba con la naturaleza regando las plantas. 

  Mi papá hizo una foto a mi Abu Grande, a mi mamá y a mi abu para el recuerdo.




Lo estábamos pasando muy bien, pero nos tuvimos que volver pronto para Alicante porque nos ibamos  de crucero por el Mediterráneo. Ya os contaré. Un besito.






lunes, 4 de agosto de 2014

¡COSAS DEL VERANO!


Hola a todos:





Comienza el verano y empiezan los cambios. Mi hermano está haciendo un campamento de verano en Tucumán, al lado de casa. Yo sigo en Pitusos. Los papás trabajando.










 El finde solemos irnos a la playa, al parta de mis abus. Aquí, en la foto, estamos  viendo  los dibus. Mi hermano tiene en sus manos la taza de ballenas que le han traído los abus de su viaje a Islandia.

A mi me han   regalado una mantita de  lana y un  frailecillo, el pájaro  representativo de Islandia.







A mi hermano le ha hecho mucha ilusión la foto de la ballena.






 Con el calor es preciso regar las plantas de la terraza de mi abu.
 Mi hermano y yo le ayudamos.






Una de estas tardes vinieron a vernos Ángela, la ahijada de mi  abu y sus papás. Dimos un paseo por San Juan Playa y, mientras yo dormía en mi sillita,  ella y mi hermano se hicieron una foto con un coche curioso.





También con un triciclo muy original.








Luego, mi hermano  quiso presentarnos su enorme delfín, aunque no le dejan  llevarlo a la piscina. Pero si lo llevamos al mar y nos subimos los dos en su lomo hasta que una ola juguetona nos lanza al agua. Pero nosotros no cejamos en el empeño y volvemos a subir a su lomo una y otra vez.




Casi siempre, de tanto pelear con el animal,se queda muy cansado.




 Mientras está así, yo aprovecho para coger su  patín y darme una vueltecita por el salón. Porque cuando está al loro no me deja ni tocarlo.
Un besito.