jueves, 9 de agosto de 2012

¡SON TANTAS EXPERIENCIAS!

Hola a todos:

Sólo tengo poco más de un mes y estoy impresionado de todo lo que descubro cada día. Aunque no soy un elemento  muy activo, pues ya sabéis que me dedico de manera casi exclusiva a dormir, comer, evacuar y lloriquear cuando las cosas, entiéndase mi bibe, no están en su momento,  estoy continuamente expuesto a estímulos y situaciones nuevas que van modelando mi desarrollo.




Hoy, por ejemplo,  me he emocionado repetidas veces. Primero, porque mi  mamá me ha puesto un traje de cochecitos de colores. Coches de diferentes tamaños y colores que convertían mi cuerpo en un circuito de automóviles rebosante de alegría.


Después, han colgado un móvil de colores de la capota de mi carrito. El móvil está hecho con cañas, que por la forma de estar trabajadas más parece un trabajo de papiroflexia. Lo componen un conjunto de pajaritos amarillos, rojos, azules, verdes, rosa...





Me lo trajo una amiga de mis papás, de México. Cuando se mueve, parece que los pajaritos quisieran retomar  el vuelo y comienzan a revolotear. Lo observo y me quedo boquiabierto.
 Así, lleno de colorido y muy contento, me fuí con mis papás y mi hermano al encuentro de Carmen y sus papás, en Playa de S. Juan. Nos sentamos en la  terraza de una heladería. Las mamás  pusieron los carritos uno al lado de otro.

Después, como Carmen tenía ganas de comer, su mamá, Jéssica, le dió un bibe. En la foto se puede observar como Carmen reclama mi atención, pero yo no la veía porque miraba para el otro lado. Tampoco ella se explicaba demasiado. Esa noche nos fuimos a dormir más tarde de lo habitual, pero lo pasamos muy bien.


 Otra experiencia destacable ha sido tomar el bibe de manos de mi hermano. Estaba yo succionando la tetina,en brazos de mi papá, cuando sentí una enorme fuerza que empujaba el bibe. Mi hermano Miguel  estaba a mi lado.





 Cuando oí decir "manito toma" comencé a chupar como un campeón. Satisfecho, me acosté y me dispuse a dormir. De la emoción, me costaba cerrar los ojos. Gracias, hermanito, por tu ayuda. Os dejo con él.Un besito.




 
 


Hola a todos:

Después de que mi hermano Mateo se haya explayado con vosotros, es hora de que os cuente algunas de mis cosas.

Para empezar, os diré que Lourdes me ha regalado unas bonitas zapatillas Adidas, de playa, de color azul, uno de mis colores preferidos, el otro es amarillo limón, con unas rayitas blancas.


Son tan bonitas que no he podido resistir la tentación de  hacerles una foto.




También, una de estas tardes, me fuí con mi abu a echar de comer a los patitos del lago del  golf. Nos llevamos una bolsita de pan, en trocitos, y les íbamos echando poco a poco . Ya voy aprendiendo a tirarles el pan. Antes se lo acercaba al pico hasta que un día, el cisne blanco  de cuello largo me dió un mordisquito en la mano. Desde entonces lo lanzo por los agujeros de la malla.



Luego nos fuimos a visitar a mi abuelita, a su parta. Allí jugué en la casita del bosque, me metí dentro, me senté en el banquito y abrí las ventanas para dar sustos a los que se  acercaban. También me deslicé  por el tobogán naranja.




Pero algo que me ha gustado mucho ha sido comerme mi primer helado. Ya sabéis que como de todo y que, normalmente, todos los sabores me agradan. Pero una experiencia muy agradable y refrescante ha sido probar el helado. Agarré el cucurucho y comencé a lamer con ansia, tanta como la que muestran los políticos actuales al repartirse las prebendas. Según mi mamá, me quedé todo lleno  de helado, embadurnado, pero mereció la pena por algo tan rico.

Camino de la playa, mi yaya nos hizo a mi abu y a mi esta foto tan chula, ya que parecemos unos rockeros estivales.


Y para terminar,  he de manifestaros que ya he aprendido a posar para una foto. Ocurrió el otro día, una  mañana, cuando mi abu me dijo:






-Miguel, coge tu pelota y mira a la cámara, que te voy a hacer una foto.
Yo le contesté: -¡Vale, abu!
Cogí mis juguetes y miré a  la cámara. Mi abu apretó  el disparador y salió esta foto tan bonita.
Un besito.